La Celebración del Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor surgió a partir de una iniciativa de la UNESCO el año 1995, con el objetivo de valorizar los libros y sus autores, busca estimular el gusto por la lectura, fomentar la industria editorial y la protección de la propiedad intelectual a través del derecho de autor.
El Origen del Día del Libro se remonta a 1926. El 23 de abril de 1616 fallecían Cervantes, Shakespeare y Garcilaso de la Vega. También en un 23 de abril nacieron – o murieron – otros escritores eminentes como Maurice Druon, K. Laxness, Vladimir Nabokov, Josep Pla o Manuel Mejía Vallejo. Por este motivo, esta fecha tan simbólica para la literatura universal fue la escogida por la Conferencia General de la UNESCO para rendir un homenaje mundial al libro y sus autores, y alentar a todos, en particular a los más jóvenes, a descubrir el placer de la lectura y respetar la irreemplazable contribución de los creadores al progreso social y cultural.
En Chile, según el decreto 4.923 de 1927, se celebraba el día del libro cada 29 de noviembre, en conmemoración al nacimiento de Andrés Bello. Sin embargo, y a pesar de que ninguna norma ha derogado aquel decreto, desde que la Unesco instauró el 23 de abril como el Día Internacional del Libro, nuestro país lo celebra en la misma fecha que los demás países.
Para concluir, la lectura es una actividad que forma parte de la vida de muchas personas en el mundo y la idea de celebrar este día internacional busca seguir incentivando el interés hacia la literatura de jóvenes y adultos.